Una sensación de opresión sobre el pecho, 4:30 de la mañana, una escena... Miles de bengalas centelleantes irrumpiendo en la habitación, antorchas portadas por sombras desfilando frente a mí... Palpitaciones ajetreadas, fragmentos de sueños inconclusos, íncubos, demonios marmóreos, y luego un abismo insondable, murmullos, una agonía incesante.
Luego la realidad: Uno de los peores días: el colapso.
El reencuentro a mitad de una avenida interminable, el reproche, la negación: el vacío. ¿Y qué esperabas?
Did they get you trade your heroes for ghosts?
Hot ashes for trees? Hot air for a cool breeze?
Cold comfort for change? And did you exchange
a walk on part in the war for a lead role in a cage?
Años luz entre tú y yo, siempre son los años, siempre las horas.
Y luego, la noticia del deceso. ¿A qué debías esa prisa por liberar tu espíritu? Ahora no podré encontrarte tan fácilmente.
Y después, las ilusiones que no lo fueron. "Nothing is full of anything, the doors are shut."
Y para terminar, el colapso, el tiempo que transcurre y no fluctúa desde el piso 15: la neurosis y la ignominia de los humanos, malditos humanos, si tan sólo no existieran (pero es que, ¿en verdad existen?)
If all of the strength
And all of the courage
Come and lift me from this place
I know I could love you much better than this
Full of grace...
3 comentarios:
muchas gracias por ese jueves increible, ya sabes quien soy.
Imagino que oscilar imaginariamente entre un decimoquinto piso y la vereda debe ser algo denso. Un colapso, un drama y los años...
el bólido tiempo.
Las cosas colapsan para abrir agujeros, resquebrajar el suelo sirve para mostrar algo que yace ahí y que generalmente es más brillante y misterioso que lo que esta afuera.
Sólo hace falta tener el valor para mirar.
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