viernes, octubre 07, 2005

Cruzando puentes.

La bruma trajo consigo un halo de introspección que difícilmente podría ausentarse. Me he apartado de todo y me refugié en mí mismo. Ciertamente, reencuentro viejas fotografías mentales que por varios años estuvieron lejos de la memoria recurrente.

Soy yo en un rincón del Paraninfo, escondido y dopado, luego soy yo caminando solitario en la madrugada, luego soy yo saltando de una cima de la que nunca termino de caer, luego soy yo en medio del río, acompañado... Luego soy yo regresando a casa.

Y tras cerrar la puerta, la nada, el silencio... La bruma.

¿Cuántos años son así?

¿Cuánto tiempo he caminado? ¿Cuántas calles? ¿Cuántos pasos?

He cruzado tantos puentes, y caído de tantas formas a la mitad. De otros me he arrojado, y de unos más he redireccionado el rumbo.

Justo ahora, vislumbro uno. Es tan cercano como para concebirlo distante, y tan lejano como para malgastar fuerzas corriendo.

De algo estoy seguro: llegará el día en que cruce un último puente, y tras hacerlo, la brecha recién pisada habrá sido sólo un señuelo.

No hay comentarios.: