"In the cold light of morning
while everyone is yawning,
You're high,
In the cold light of morning
the party gets boring,
you're high."
Placebo, In the cold light of morning.
Una luna llena adamantina, imperiosa en el firmamento (como corresponde al plenilunio de noviembre), mostró un espectacular halo luminoso a su alrededor, minutos antes del amanecer. Aunado a este hecho, cinco cuerpos celestes -Mercurio, Venus, la Luna, Marte y Saturno- se alinearon de modo aparente, para perpetuar la fecha.
Acá, en la superficie terrestre, entre vino tinto y rostros conocidos, una serie de pensamientos y emociones muy extrañas me abordaron. No eran sobre finales, sino sobre comienzos.
Fue como si en ese instante hubiese dejado atrás a todo el mundo previamente concebido, con todo su pasado a cuestas, y me concediera la oportunidad de creer que los grandes momentos de la vida son asuntos bastante sencillos, cuestiones de Voluntad y Fe.
Al despuntar el amanecer, una densa niebla cubrió las cumbres, (la misma que durante años nos ha llevado a imaginar e incluso constatar la existencia de Dios).
Recorrer ese paisaje en auto, en compañía de los amigos, otorgaba una tranquilidad infinita.
Supongo que alguna vez, en el incierto futuro, serán las mañanas como ésta las que recordaremos con entusiasmo.
1 comentario:
ni la agotadora fatiga podra hacer que deje de leerte!
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